Brasil, un pionero en las votaciones electrónicas que han aumentado la velocidad y transparencia de sus escrutinios, comenzará a probar en las próximas elecciones municipales una nueva versión de urna que identificará a los votantes mediante las impresiones digitales.
El Tribunal Superior Electoral (TSE) dijo que tiene como objetivo contar con datos biométricos de todos los electores del país en un plazo de 10 años, en un proyecto que contempla inversiones por 200 millones de reales (119 millones de dólares).
Los tres municipios donde se usará la nueva versión de la urna electrónica este año serán los de Fátima do Sul, en el estado de Mato Grosso do Sul; Sao Joao Batista (Santa Catarina) y Colorado D'Oeste (Rondonia), informó la estatal Agencia Brasil.
En esas ciudades, los electores serán identificados apenas por las huellas dactilares en vez del habitual título de votante.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Policía Federal, dijo el TSE.*.
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